jueves, 3 de octubre de 2024

Revista

A finales de mayo comencé a escribir una refelxión basada en una experiencia personal que cimbro la mayoría de mis relaciones en ese entonces. No solo las relaciones con personas cercanas, sino también con ideales, conviviones y talentos que me sostuvieron por tres años. La publicación de ese escrito, convertido en ensayo fue la finalización de un duelo muy especifico,  de una serie de contradicciones con las que tuve que enfrentarme. Por primera vez escribo desde un lugar vulnerable, apropiandome de mi propia voz y llamando como mías aquellas inseguridades, quiero pensar que esa honestidad permeó lo suficiente en el texto como para que se decidiera publicarlo.

Encontraran ese testimonio en el primer ensayo de esta revista "El Valor de Ocupar un Espacio" Por Vaneesa M. de Ávila, es decir, yo.




Revista La Sílaba "Un Caurto Impropio" 




miércoles, 5 de junio de 2024

 

SEXTINA DEL VAMPIRO

Neil Gaiman (trad. de Alberto Chimal)

Espero aquí en los límites del sueño,

envuelto en sombras. Sabe el aire a noche,

nueva y helada. Yo espero a mi amor.

La luna deja sin color su tumba.

Ya viene. Iremos por el bello mundo,

oscuros, tras de la exquisita sangre.

*

Es juego solitario el de la sangre;

pero el derecho de buscar un sueño

no lo abandono ni por todo el mundo.

La luna quita sombras a la noche.

De pie en lo oscuro, miro hacia su tumba.

No-muerta amada… ¿Mi no-muerta? ¿Amor?

*

Soñé contigo; supe que el amor

era más que la vida y que la sangre.

El sol quiso sacarme de mi tumba—

a mí, más que cadáver y en mi sueño.

Lo logró su partida y en la noche

salí, como un vapor, de nuevo al mundo.

*

Por siglos he vagado por el mundo,

dando un regalo que parece amor.

Robar un beso; volver a la noche,

saciado por la vida y por la sangre;

y a la mañana ser de nuevo un sueño,

un cuerpo helándose en su propia tumba.

*

No te haré daño, dije. No soy tumba

en la que te destruyan tiempo y mundo.

Te ofrezco una verdad mayor que el sueño,

a cambio solamente de tu amor.

No te preocupes, dije, que la sangre

sabe mejor corriendo y por la noche.

*

A veces mis amantes, por la noche,

salen; si no, se pudren en la tumba:

no disfrutan del cuerpo ni la sangre,

de caminar por la sombras del mundo;

las comen los gusanos… Oh, mi amor,

ellos dicen que has vuelto, allá, en mi sueño.

*

Esperé ante tu tumba media noche.

No sales de tu sueño a buscar sangre.

Buenas noches, mi amor. Te ofrecí el mundo.